El actor platica una desafortunada anécdota que le sucedió dentro de las grabaciones de la telenovela, en la que su vida estuvo en peligro.
Con más de veinte años de carrera, Jorge Aravena agradece la oportunidad de haber trabajado en la telenovela Zacatillo, un lugar en tu corazón, la cuál llegará a su fin el próximo 30 de julio.
"Estoy muy contento por todo lo que me ha estado pasando últimamente y más mi llegada aquí a México, un mercado súper importante, Televisa es una gran empresa a nivel mundial, la número uno en telenovelas, por lo menos a lo que yo me dedico".
El actor, nacido en Perú, ya había trabajado en Miami con la productora de Zacatillo: "Se dio la oportunidad de venir a México, a Lucero Suárez le mando un gran beso y agradecimiento por fijarse en mi. Todo se encamina para que yo esté en este momento en México, podría estar un año, cinco años, diez años aquí".
Aunque ha trabajado en varios países de Latinoamérica, Jorge tuvo algunos inconvenientes en México: "En modismos sí, de repente a veces pregunto o a veces se me sale una palabra mexicana que la he escuchado pero en la calle o con los cuates como se dice aquí, y entonces de repente yo la digo y se me quedan viendo así, ¿dije algo malo?".
Estuvo a punto de sufrir un aparatoso accidente durante una de las grabaciones de la telenovela: "Voy en la camioneta, dije yo lo puedo hacer, no me gusta usar dobles, si me tengo que colgar de cabeza me cuelgo yo, de repente estaba como mojado y tenía huecos, tenía que colearme, y de repente cuando voy pasando por los huecos se revienta una llanta y la camioneta se va completa y yo lo que veo es un árbol muy grueso, y otro árbol o sea en plena toma de la novela, y de repente le doy al otro lado al volante y quedó en un precipicio la rueda de adelante".
Aravena podría quedarse más tiempo en México, ya que tiene otros proyectos de trabajo: "Ahorita estoy en conversaciones con Televisa ya bastante avanzadas, parece que me quedo aquí, me siento muy contento de estar aquí, tomaré unas vacaciones, yo siempre digo unos tres meses de vacaciones, al mes ya quiero un libreto ya quiero una cámara al frente".
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